LOS LAKERS DE GASOL


Ese era el título de un artículo que me publicaron como amateur en Marca, cuando los Lakers de Shaq y Kobe (y Phil) eran imparables y el ala-pivot de Memphis empezaba a hacerse con un nombre en la liga tras matear en la cara de Kevin Garnett y encararse con él. Hoy día leo esa expresión en cada uno de los artículos que sobre estos Lakers campeones se publican y me da un poco de ese orgullo precognoscitivo. Estas finales han sido como me gustaba recordar a mi amigo Kike Blanco: "el que vive del triple, muere del triple"... pero a lo bestia. Los aleros angelinos apretando las tuercas a Rashard Lewis, mucho peor jugador que Turkoglu aunque el caché sea distinto, cerraron las opciones de victoria a los de Orlando, donde Dwight Howard ha demostrado que aún está un poco verde para este juego, como lo estaba Shaq cuando se enfrentó a Olajuwon, tiempo ha.

Kobe estuvo inmenso hasta en los fallos y Pau ha sido el escudero fiel con galones de mando en plaza que ha sabido usar su calidad en beneficio de su equipo. Ha sido una sensación de orgullo matizada por una amigdalitis que me impide gritar lo que deseo: el primer jugador español en ganar un anillo de la NBA y con los Lakers!!! Demasié pal body...

Y casi sin esperar, ya tenemos aqui el draft de Ricky (y de Claver).

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